Todas sabemos que antes de utilizar el secador de pelo, las planchas o los rizadores debemos aplicar un protector térmico sobre el cabello para que éste no sufra. Porque también sabemos, y hemos comprobado en nuestras melenas, que el uso, a veces diario, de estos aparatos repercute sobre su aspecto y su vitalidad.
Las altas temperaturas, que en ocasiones llegan a los 230 grados, dañan el pelo tanto en la superficie como en su interior. En la superficie, el calor deteriora parte de la película protectora que el cabello tiene de forma natural. Ese “deterioro” provoca que las escamas se abran, se produzcan fisuras, se “escape” el agua del interior y, en consecuencia, el pelo se queda seco, sin brillo, áspero y encrespado.
Pero ahí no acaba el desastre. En el interior del cabello se produce una “herida térmica” o lo que es lo mismo, una degradación de la queratina, un daño en la fibra y una pérdida de las reservas de hidratación. Todo esto hace que el cabello se debilite y se vuelva más quebradizo.
Pero todo esto parece que va a ser historia con la llegada de La Crème 230 de Hair Rituel by Sisley, un nuevo tratamiento protector y reparador para el cabello activado por el calor. Gracias a su nueva tecnología termoactiva, consiguen introducir activos reparadores en el corazón de la fibra capilar para protegerla y embellecerla. Dicha tecnología se basa en dos polímeros iónicos capaces de realizar una reparación activa bajo el efecto del calor. Os explico.
Tras aplicar la crema sobre medios y puntas, con el calor de las planchas (o del secador) se forma una especie de microgel adhesivo sobre cada cabello que sella las partes dañadas y rellena las fisuras dejando el cabello reparado y brillante ya que, al “cerrarse” las escamas, vuelve a reflejar la luz. Además, el cabello se cubre con una barrera protectora muy ligera e imperceptible que limita la degradación de la queratina. Según las pruebas realizadas por la marca, se consigue una reducción de los problemas de rotura (dos veces menos) y de la aparición de puntas abiertas (una reducción del 77%).
Esta crema de tratamiento sin alisado se puede aplicar tanto en el cabello húmedo como seco y además de los polímeros iónicos está enriquecida con aceites vegetales (de camelia y moringa) que nutren y suavizan el pelo y proteínas de algodón que refuerzan su estructura. El resultado es un cabello más suave, nutrido, luminoso y suave.
