Ya sabéis que en verano el calor, la humedad, el mar, el sol, la arena de la playa, el cloro de las piscinas… pueden estropear, y mucho, el cabello ya que todo ello hace que disminuyan los niveles de hidratación provocando que el pelo se seque más de lo debido, se encrespe y sea más propenso a la rotura.
La semana pasada os contaba que los aceites capilares ni engrasan ni ensucian el cabello siempre que se utilicen bien y hoy os traigo una selección (todos se venden en Sephora) para que podáis elegir el que mejor se adapte a vuestros gustos y necesidades y algunos consejos para sacarles el mejor partido. Los consejos no son míos, son de Inma Jiménez, Training Manager de Sephora para España y Portugal.
Esta experta nos cuenta que “los aceites trabajan formando una película en la fibra capilar, que retiene la humedad en la superficie, lo que previene de la pérdida de agua y hace que el pelo se vuelva más manejable”. “Además”, explica la profesional de Sephora, “actúan también como barrera natural protegiendo al cabello del sol, aunque no está de más que el producto contenga algún filtro solar”.
Precisamente esa función barrera hace que los aceites se conviertan en auténticos salvavidas capilares en las piscinas. Esa especie de barrera o de película protectora que crean sobre los cabellos consigue que el agua con cloro se “deslice” por el pelo, “impidiendo, añade Inma Jiménez, que se deposite en exceso en la fibra capilar, y que la reseque y oxide su coloración”.
¿Y cómo lo aplicamos? La experta aconseja hacerlo antes de la exposición solar, en la zona de medios a puntas. “Solo si se tiene el pelo rizado conviene aplicarlo también -en mucha menos cantidad- en las raíces. Como rutina post-solar, se aplica, tras la ducha, exclusivamente en la zona de las puntas, para mantener la hidratación”.
¿Y qué aceite es mejor para cada tipo de cabello? El de argán es el más común y el más reconocido de los aceites capilares, es perfecto para combatir el encrespamiento, gracias a su mezcla de antioxidantes naturales, y a sus propiedades desenredantes y potenciadoras del brillo. “En caso de pelo fino, añade Inma Jiménez, lo ideal es optar por un aceite ligero, como el de Macadamia o el de aguacate: nada grasos ni pegajosos, no dejan una sensación pesada en el pelo y son de fácil absorción para el cuero cabelludo”.
Más aceites:
Holiroots Hair Oil de Fable & Mane. Aceite para el cuidado de las raíces inspirado en un antiguo ritual indio que contiene ashwagandha fortalecedora, para un cabello más saludable e hidratado desde la raíz hasta las puntas. De textura ligera. 31,99 €.
Sérum Regenerador con aceite de tuna de Christophe Robin. El aceite de tuna, uno de los más ricos del mundo vegetal, contiene una alta concentración en omega y aminoácidos, que ayudan a fortalecer el cabello. Su textura híbrida hace que penetre rápidamente en el cabello. 38,99 €.
Every Season Oil de Seasonly. Con un 90% de ingredientes de origen natural, aporta luminosidad al cabello de forma instantánea. 76,99 €.
Aceite seco nutritive Rostro, cuerpo y cabello de Respire. Con una fórmula de 3 aceites vegetales de las localidades francesas de Auvernia y Gascuña, es vegano y con certificación ecológica. Ni graso, ni pegajoso. 22,99 €
Brazilian Glossy de Sol de Janeiro. Aceite nutritivo que combate el encrespamiento, aporta brillo, protege del calor, al tiempo que hidrata y repara el cabello seco y dañado. 34,99 €
1 Comentarios
angeles
Alguna vez los utilizo cuando me queda duro el pelo con la espuma fuerte, pero a mi pelo no le gustan mucho porque se abomba.