He de reconocer que cada vez que recibo un paquete de The Body Shop me viene a la memoria uno de los perfumes que utilicé en mi juventud. Se trataba de White Musk. En aquella época, hace más de veinte años, traspasar el umbral de cualquiera de sus tiendas era una experiencia única en España. Después llegarían otras marcas con una filosofía similar, boutiques de cosmética, perfumerías nicho,… Pero en aquel momento, para una estudiante como yo, descubrir esa variedad de aromas, texturas y productos a un precio asequible era algo especial y eso que aún no sabía que acabaría enfocando mi futuro precisamente en el mundo de la belleza. Por eso, hoy, cuando recibo las novedades de esta firma las acojo con un cariño especial. Entre las últimas que han llegado a mis manos se encuentran dos ediciones especiales, la de frambuesa, dan ganas de comérsela, y la de gardenia que te transporta directamente a un jardín en plena floración primaveral. Esta última sólo estará a laventa durante los próximos tres meses y consta de un agua de colonia, un gel, un body mist y una loción corporal (precios entre 9 y 25€). ¡Ah! Tanto el agua de colonia como el Body Mist contienen alcohol de Comercio Justo con Comunidades de Ecuador 100% orgánico. Una primicia en el mercado, ya que el alcohol orgánico de comercio justo no se ha utilizado en fragancias anteriormente.
La otra línea de la que os hablaba tiene a la frambuesa como protagonista. La curiosidad de esta nueva edición especial es que las frambuesas que se emplean en la elaboración de estos productos se recogen antes de lo habitual para conservar todos sus antioxidantes. La colección consta de la emblemática manteca corporal de The Body Shop, un exfolinte corporal, una loción corporal y un agua de colonia
