Ya sabéis que siempre que puedo me escapo a mi particular refugio en el sur. Allí descanso y aprovecho para cargar las pilas. Y en esta ocasión lo primero, el descanso, era fundamental (llevo desde marzo sin parar de trabajar) y cargar las pilas más, que todavía me queda rodaje por delante de mi serie Now and Then.
Esta vez han sido solamente tres días pero me han servido para dormir (mucho), pasear por la playa y desconectar con mis amigos de siempre. Y, estos amigos, Gonzalo y Judith, nos propusieron, a Pedro y a mí, ir a cenar a un nuevo restaurante de Marbella. Y como no soy muy de salir cuando voy a mi “refugio”, al principio me resistí un poco pero después… no sabéis lo que disfruté en Thaissence, que así es como se llama esta joyita gastronómica ubicada en pleno centro de Marbella, concretamente en la calle Ancha.
Su chef, Pablo Rebollo fusiona de maravilla las cocinas tailandesa y peruana con productos frescos y de kilómetro cero. Y me encantó todo, desde los sabores a la presentación de los platos. Os dejo una muestra en las fotos.
Este restaurante se encuentra en un hotel, también nuevo, llamado Maison Ardois, el primer hotel boutique de La Ciudadela de Marbella, un complejo con distintos hoteles de lujo situados en algunos de los edificios más singulares y con más historia de la ciudad malagueña.
