Cuenta la leyenda que Cleopatra hacía enviar a sus secuaces a Turquía para que le trajeran el más exquisito aceite de rosa negra, era el elixir secreto con el que volvía locos a Marco Antonio y Julio César. Un secreto que guardó celosamente para que nadie pudiera competir con su belleza, y astucia… Hoy todos olemos igual. Somos copias olfativas, seducidos por las triquiñuelas del marketing. Si una amiga lleva un perfume que huele bien, “–Mmm… qué bien hueles, ¿qué llevas? –Light Blue, de Dolce & Gabbana”, y vas y te lo compras. Y te da igual ir oliendo igual que tu amiga, compartir su personalidad aromática, como si no hubiera nada que te definiese solo a ti… Por eso un día me propuse investigar lo más diferente del mercado, perfumes simbólicos, con fábulas que contar, con sensaciones puras que transmitir y de pronto encontré a Yosh. 
Yosh es ese ser inquieto, pizpireta, que combina el arte de hacer perfumes con el Reiki y la lectura de aura. Yosh se mueve como pez en el agua en el mundo de las energías. De hecho asegura no componer un perfume según la clásica pirámide olfativa: notas de salida, de corazón o de fondo, sino que combina los ingredientes según sus energías, y lo que desea que cuente la fragancia. Imagina fórmulas capaces de trasmutar estados de ánimo, es lo que ella denomina “trans-aromación”, se centra en las virtudes curativas de las flores y plantas y el poder sugestivo de los aromas, y así crea fragancias que equilibran los chakras y te alivian la depresión o te suben la libido. Es el poder del perfume. Su colección “Evanescent” combina el arte de la antigua perfumería con el poder curativo de la aromacología y la numerología. Como ella dice, no se trata de una simple colección de fragancias sino de un fondo de armario olfativo que accesoriza emociones y personalidades, incluyendo tu ‘alter ego’. De momento son seis los perfumes que componen la colección, pero a pesar de mi debilidad por Omniscent 0.96, un oriental amaderado que armoniza bien con el chakra 9, el del aura, siento curiosidad por U4eahh! 2.43, un aroma frutal acuático que además de equilibrar el chakra del corazón, dicen que induce a la felicidad. ¿Una fragancia que te pone contento? Pues lo hace, o al menos te transmite la sensación de que hoy puede ser un gran día…
Aparte de Evanescent, Yosh crea perfumes individuales, su última creación es könig, un aroma masculino balsámico que te transporta a los bosques negros bávaros del Medievo, de esas fragancias para ellos que siempre terminamos usando nosotras… Para terminar, pedí a Yosh que me leyera el aura. Era la primera vez que me lo leían y estaba bastante expectante aunque un poco escéptica también, he de confesar. Tenía unos colores muy bonitos. Malvas, naranjas, amarillos… Pensé que me iba a decir cosas como “cuídate de las energías negativas”, pero Yosh se remontó más allá de mi pasado lejano, y pudo llegar a alguna de mis anteriores vidas, una que me dejó un poco inquieta la verdad… Yo, como Cleopatra, guardaba celosamente mis secretos, también era egipcia, y guapa y poderosa, pero no encargaba elixires de amor para subyugar a mis amantes, sino pócimas venenosas para acabar con ellos… Menuda viuda negra estaba hecha… Eso sí, siempre oliendo bien.
1 Comentarios
Ines Rocha
Hola guapa!!,
Menudo descubrimiento,por lo menos,no oleremos tod@s a lo mismo!!,
Me doy una vuelta por su web!!!