Ya sabéis que soy muy pesada con la protección solar pero basta con echar un vistazo a las cifras que se publican cada año sobre el cáncer de piel para darse cuenta de que aún hay mucha gente que considera innecesario el uso del fotoprotector. También hay quien opta por achicharrarse bajo el sol con el único fin de lucir un bronceado acorde con los modelitos que se ha llevado a la playa y no duda en dejarse el sueldo en bikinis y pareos sin darse cuenta de que, literalmente, se está jugando la piel para salir morena en las fotos de Instagram. Por supuesto, cada cual es libre de hacer lo que le parezca pero por mí que no quede. Hoy os voy a enseñar distintos fotoprotectores que responden a diferentes tipos de piel.
Rostro:
Para las pieles mixtas y grasas conviene utilizar texturas fluidas o en emulsión en lugar de cremas. Podéis elegir entre los fluidos de Galénic (SPF30), Polysianes (Fluido Sedoso al Monoï 50+ o Fluido Precioso SPF 20) o A-Derma Protect (Fluido 50+).
En cambio, las pieles normales o secas necesitan texturas más untuosas, en leche o en crema, que hidraten y nutran. Tanto Galénic como A-Derma cuentan con fotoprotectores con SPF 50+ para lograrlo.
Y si se tiene una piel acneica, lo mejor es optar por protectores solares específicos, aunque la exposición moderada parece mejorar las lesiones provocadas por el acné, si se toma el sol en exceso, a la larga, se agrava el problema. Por eso es necesaria la protección solar eso sí, sin emplear productos con sustancias grasas y que tengan filtros no comedogénicos. Son recomendables Protect AC 50+ de A-Derma y Avéne Cleanance 50+ y 30.
Y, si lo que preocupa son las manchas, las que ya existen y las que pueden aparece con el sol, Ducray cuenta con dos fotoprotectores en su línea Melascreen UV, uno para pieles secas y otro para mixtas y grasas.
Cuerpo:
En el cuerpo y si no existen problemas podemos elegir el formato que más nos guste en crema, en spray, en aceite, en gel,… Tanto Avène, como Galénic, Polysianes o A-Derma tienen texturas para todos los gustos. Eso sí, conviene que con los más pequeños de la casa se extremen las precauciones con fotoprotectores específicos para su tipo de piel. Los protectores infantiles de Avène (en leche y en spray) y de A-Derma (spray) son muy recomendables.
Y si se tiene la piel atópica, que se sensibiliza más bajo el sol, mejor optar por una fotoprotección testada en pieles con dicha patología como A-Derma Protect Crema Atopía 50+, que contiene un complejo emoliente con agentes hidratantes y nutritivos protectores filmógenos y reforzadores de la barrera cutánea.
Cabello:
Aunque cada vez se ve a más gente en la playa empleando protectores solares capilares (como el de aceite de mango de Klorane) aún nos queda mucho camino por recorrer en este sentido. Algo normal cuanto todavía no hemos llegado a la meta en la protección de la piel pero en fin…
Nuestra melena se debe cuidar tanto a la hora de tomar el sol, como cuando nos lavamos el pelo tras la jornada playera. Para protegerlo y nutrirlo René Furterer cuenta con una completísima línea en la que se incluye el KPF (Keratin Protection Factor), creado y patentado por la marca que permite medir de forma precisa la protección que aporta un producto solar capilar. Además, el aceite de sésamo aporta nutrición intensa y un efecto brillante además de prevenir la sequedad.
La línea cuenta con un Fluido y un Aceite Solar Protector, que pueden aplicarse las veces que se deseen sobre el cabello húmedo o seco. Además, con el champú, la mascarilla y la bruma hidratante para después del sol de la misma línea se reparan los daños causados por el sol y mantienen el cabello en buen estado.
