Yo tampoco lo sabía y me enteré ayer durante la presentación de Hairstylists For The Future, el programa de sostenibilidad creado por L’Oréal Productos Profesionales y con el que apuestan por una industria de la peluquería profesional más sostenible.

Este interesante y ambicioso programa cuenta con socios locales y alianzas internacionales para conseguir objetivos basados en tres pilares: reducción en el uso de agua, reciclaje de residuos y alternativas limpias del consumo de energía en los salones de peluquería de España. De momento ya cuenta con 3.000 salones adscritos de 23 países y el objetivo es llegar a los 10.000 en 2023.

Entre sus apuestas se encuentra la que os avanzaba en el titular de este post: reciclar el cabello cortado y convertirlo en mantillos para la agricultura regenerativa o en redes biodegradables para la limpieza de aceites, hidrocarburos y metales pesados en puertos, ríos y mares. 
 Se estima que el 60% de los residuos generados por las peluquerías lo constituye el pelo cortado. Bien, pues L ́Oréal Productos Profesionales cuenta con la start-up española Clic Recycle para reciclar el cabello. Su programa de recogida apuesta por la valorización de esta materia orgánica transformándola en:

  • Mantillos para la agricultura regenerativa. Elaborados en un 50% con pelo cortado (el otro 50% son fibras vegetales) cuyo alto contenido en nitrógeno les hace funcionar como un abono natural que permite prescindir de los fertilizantes químicos. Se estima que 3 kg de cabello humano contienen 500gr de nitrógeno. Además, pueden combatir plagas, malas hierbas, y proporcionan un enorme ahorro de agua de riego, ya que evitan la evaporación y mantienen la humedad (el cabello absorbe hasta 8 veces su peso en agua).
Mantillo
  • Redes biodegradables de cabello para la limpieza de aceites, hidrocarburos y metales pesados en puertos, ríos y mares. Hasta ahora, el material utilizado para captar estos materiales ha sido el polipropileno. El pelo, además de biodegradable, ha demostrado ser más absorbente con materiales como el cadmio, cobre, zinc o plomo. Según datos de la propia start-up, un kilo de cabello puede absorber hasta 8 litros de aceites y petróleo.
“Boyas” rellenas de cabello reciclado para limpiar los mares

Con este reciclado del cabello se evita además su incineración, que es lo que se hace con el cabello que se “tira”. Simplemente al no quemarlo ya estamos reduciendo las emisiones de CO2 a la atmósfera ya que la incineración de un kilo de cabello produce 4,5 kilos de emisiones de CO2. 

Otra iniciativa en materia de reducción de residuos, y en concreto, del consumo de detergentes, es la colaboración con Grupo Idris. Gracias a su dispositivo Ecoidris, un equipo de ozono en agua para instalar en lavadoras permite lavar la ropa sin usar detergentes ni suavizantes, solo con agua fría y ozono, que además es un potente desinfectante natural.

Dos de las innovaciones más importantes de este programa se dirigen a la reducción del consumo de agua. Se trata de dos dispositivos que me estoy planteando instalar en mi casa. Os cuento:

  • Water Saver, un cabezal de ducha para los lavacabezas desarrollado con la start-up suiza de tecnología ambiental Gjosa, cuya tecnología de fragmentación de agua permite ahorrar hasta el 69% del agua utilizada en cada lavado. Para entendernos, lo que hace es “descomponer” cada gota de agua en muchas otras y mucho más pequeñas. Con este “grifo” en lugar de consumir 8 litros por minuto se emplean dos litros y medio de agua. Además, al crear gotas que son 10 veces más pequeñas, la absorción es mejor y el aclarado más rápido (tiene mucha más presión).

  • Presto Go System, un sensor que permite graduar la temperatura del agua y así evitar tener el grifo abierto hasta que salga caliente para hacer un uso más inteligente y eficiente del agua. El sensor está unido a un motor que se acopla en la caldera. Cuando se activa el sensor el motor va calentando el agua que hay en el circuito sin abrir el grifo. En el momento en que el sensor (un interruptor) cambia de color (de azul a rojo), al abrir el grifo el agua ya sale caliente. De ese modo se evita que se pierdan entre 6 y 25 litros en el tiempo de espera hasta que llega el agua caliente al grifo. Este “invento”, de Presto Ibérica, líder nacional en tecnología para el ahorro de agua, puede hacer que una peluquería ahorre hasta 110.000 litros de agua al año.

Teniendo en cuenta que España es el país con más peluquerías de Europa, (50.000 salones, uno por cada 900 habitantes), ¿os imagináis el ahorro de agua? Solo con el interruptor serían 5.500.000.000 millones de litros.

Además de reducir (el consumo de agua), reciclar (el cabello), con Hairstylists For The Future, L’Oréal Productos Profesionales ha creado asociaciones con proveedores locales de energías renovables para reducir la huella energética de los salones. Según Juan Ordoñez, director de sostenibilidad de L’Oréal Productos Profesionales: ”Nuestros esfuerzos están enfocados en poder ofrecer a los salones energías 100% renovables”.  Para facilitar el consumo de energías verdes, se ha llegado a un acuerdo ventajoso para los salones de peluquería con Gesternova, una compañía española volcada en conseguir una transición ecológica que minimice los efectos del calentamiento global.

Juan Ordóñez y Ainhoa Aramburu, director de sostenibilidad y directora general de L’Oréal Productos Profesionales en la presentación de Hairstylists For The Future

 

El objetivo de Hairstylists For The Future es que los salones de peluquería se unan a este programa y al compromiso de hacer de estos un espacio más sostenible. Para ello, desde L’Oréal Productos Profesionales se les informa sobre las opciones y beneficios de implementar nuevas tecnologías de ahorro en agua y energía o participar en programas responsables con el entorno.

Yo, si tuviese una peluquería, ni me lo pensaba.

 

 

 

 

 

 

 

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