Tras el boom de la cosmética coreana, llega la cosmética africana

Hace unas semanas se presentó en Madrid AOKLabs, una marca de cosmética africana, natural y sostenible, que curiosamente combina activos y técnicas ancestrales africanos con formulaciones ideadas en su sede sevillana.

Sí, habéis leído bien, es una marca africana que se fabrica en Sevilla. Os cuento. Katia Simone la creó en la capital andaluza en agosto de 2020. Su idea, utilizar los mejores ingredientes de África y potenciarlos con la mejor tecnología y formulaciones. En resumen, se trata de volver a la simplicidad y eficacia de lo natural, al respeto por el medio ambiente y la puesta en valor del conocimiento ancestral de lo que la naturaleza puede ofrecernos, unida al conocimiento, formulaciones y producción del laboratorio farmacéutico.

Ahora, dos años después de su creación, AOKLabs cuenta con un equipo de 60 personas en España y 250 mujeres en las cooperativas de Nakunga y Kanvili, en Ghana (África). Trabajan con 1.100 farmacias a nivel nacional y esperan cerrar este año estando presentes en el 90% de las farmacias españolas. Su enfoque  está ligado tanto a la salud y el bienestar de la piel como a la sabiduría y el conocimiento de saber aprovechar los principios activos que ofrece la naturaleza, trasladado de generación en generación.

A diferencia de las rutinas coreanas, AOKLabs reivindica una rutina de belleza minimalista en la que se utilicen solo los activos imprescindibles para el cuidado de la piel que proporcionan resultados garantizados.  Además, a la hora de de proteger la piel de los temperaturas y ambientes extremos que estamos viviendo por causa del cambio climático, los activos del continente africano son perfectos ya que nutren, hidratan y restauran las pieles más castigadas por el sol y el calor o frío intensos.

Los ingredientes más importantes de sus formulaciones llegan directamente del corazón de África, de los parques naturales de Ghana y concretamente de tres árboles que crecen de manera salvaje: el karité, la moringa y el baobab. Son semillas de tres árboles venerados por sus numerosas propiedades medicinales, cosméticas y nutricionales, que en algunos lugares del continente africano son incluso considerados sagrados, y que están presentes en los cosméticos naturales de la marca en altas concentraciones.

Desde la marca se busca que sus consumidores, además de notar los efectos en su piel, vivan una experiencia sensorial de conexión con la naturaleza que vaya más allá de la evocación de los aromas y los colores de África, sino de todo un concepto de belleza que comparten las mujeres de ese continente.

Su producto estrella, el Oro africano, es la manteca de karité 100% natural, orgánica, pura y certificada en origen. Esta manteca es un potente regenerador de la piel con un agradable olor a cacao, que hidrata, nutre y protege. La producen mujeres cooperativistas africanas por primera presión en frío, utilizando técnicas que aprendieron de sus madres y abuelas para no alterar sus propiedades naturales. Como dato, en España ya ha superado ya las 100.000 unidades vendidas.

Entre los productos de AOKLabs que también están teniendo mucho éxito de ventas se encuentran el Jabón Oro Negro, con cacao, manteca de karité y aceites de coco, moringa y oliva; el Gel Limpiador al Aceite 2 en 1, rico en aceites esenciales de moringa, baobab, geranio y lavanda y  la crema antiedad Black Radiance Facial Cream 30+, que combina los tres ingredientes estrella de la firma (karité, moringa y baobab) con el agua floral de naranja y la pepita de uva.

La nueva Cosmética Africana de AOKlabs está certificada en origen por ECOCERT, y aquí en España por BioVidaSana según las normas Bio.Inspecta. Certifican que las materias primas utilizadas provienen de la agricultura ecológica y la trazabilidad, que son 100% puras, que no hay contaminantes y que los ácidos grasos están en perfecto estado. Además, son muy rigurosos con la sostenibilidad de la cosmética, el cuidado del medio ambiente y el bienestar de las comunidades con las que trabajan.