Buenos días a todos, lo primero, os quiero mandar mucho ánimo a todos en este encierro que nos ha tocado vivir. Se que son tiempos malos, pero vamos a salir de esto seguro, sólo tenemos que tener paciencia y ser conscientes de que estar en casa es la única manera de salvarnos y al mismo tiempo, salvar vidas.

 

Mi querida Geni me llamó la semana pasada y me preguntó si me apetecería escribir un post sobre mis Cuidados de belleza durante la cuarenta. Es gracioso porque si me lo llega a decir fuera de este “encierro” que estamos viviendo, le tendría que decir que no, ya que nunca he sido una loca beauty, más bien creo que soy un poco dejada pero, como la vida cambia en un minuto, tras una semana sin salir apenas de casa (sólo algún día super y dos mini paseos al perro diarios), he empezado a prestar más atención a todas las cremas y utensilios que tengo en el cuarto de baño. Así que, como ya llevo un tiempo usando algunos productos, os escribo este post para contar cuales son.

Como ya os he dicho antes no soy una persona de muchos cuidados de belleza y eso que soy periodista del sector pero en mi caso, el dicho “en casa de herrero, cuchillo de palo” se cumple a rajatabla. Siempre he usado los productos justos, no se bien si es por pereza o por tener poco tiempo, pero ahora, no me ha quedado otra que cambiar el chip. El día tiene tantas horas que ahora pasar tiempo “acicalándome” es todo un placer. Vamos allá.

PELO

Justo antes de este dichoso encierro, me corté el pelo en mi querida Eva Villar, y siempre que voy, me mete un buen tajo lo que provoca que las primeras semanas me cuesta “pillarle la forma” al corte. Y es que, no se la razón, pero se me quedan las puntas un poco a lo loco, cosa que no me gusta nada. Y, aunque esté encerrada en casa, tengo espejos y no soporto verme esa punta a su libre albedrío. Por eso me he puesto seria y uso dos productos para el cabello además del champú, mascarilla y acondicionador.

Cuando me lavo el pelo me pongo unas gotas de Nutri Plenish de Aveda que, da hidratación y brillo al cabello. Me lo aplico en las “dichosas” puntas para ver si las puedo domar. Y luego, cada noche, antes de irme a dormir no fallan unas gotas de 8 h Magic Nigth Serum de Kerastase con el fin de nutrirlo durante la noche y levantarme con el cabello sedoso y la “dichosa punta” domada. Por ahora, no va mal el tema…

Y como no, siempre mi Dyson Supersonic, el secador que creo que es el invento del siglo. Me lo seca en tres minutos, no me lo quema nada y encima no lo calienta. ¡Es una maravilla! Y ojo, que lo uso también para secar al perro en los días que llueve y no queda más remedio que secar sus patas, eso sí, en un plis plas.

MANOS

¡Madre mía qué sequedad de manos! con esto de lavármelas 20 veces las tengo, bueno mejor dicho las tenía, ásperas. Además, debo confesar una cosa, cuando me echo crema de manos me pone nerviosa que se me queden grasientas o resbaladizas y eso me saca de quicio, pero, encontré la solución a mi problema. Hace un tiempo, mis amigas de Laconicum (web de belleza donde encontrar marcas top) me regalaron una crema que se llama Hyalomiel (tenéis la foto al inicio de este post) y ahora se ha convertido en mi bestseller; no paro de usarla ya que es formato gel y no pringa nada. La uso a todas horas y me encanta porque en tres segundos ni rastro de nada y puedo seguir haciendo cosas.

Y, hablando de hidratación, también estoy a tope con el cuerpo, y todos los días al salir de la ducha, me embadurno con crema hidratante. No es que antes no lo hiciera pero, había días, que con las prisas no tenía tiempo. ¿Qué cosas, verdad? antes falta de tiempo y ahora los días eternos. El caso es que estoy usando Créme de Corps de Kiehl’s. Cero grasienta, se absorbe rápido y huele bien.

CARA

¡Mi cara poco arreglo tiene ya pero, en este encierro voy a intentar salvarla! Y es que no se vosotros, pero a mi el momento face-time me tiene frita ya que me está haciendo ver -perfectamente- que los años pasan y que las arrugas se han apoderado de mi vida. Y claro, no puede ser… hay que hacer algo. ¿Y qué hago? Hace tiempo me mandaron la máquina de Carita My Clé y no la había usado, como suele pasar, por falta de tiempo. Pero, al verme estas arrugas, fui corriendo a desempolvarla y ahora cada dos días, me pongo como loca con la luz roja (anti-edad) y luego la blanca (luminosidad). Dicen que con 4 minutos basta pero yo, por si las moscas, me pongo 10 que el tema es serio…

 

Luego están los domingos de relax (graciosa esta palabra ahora, ¿verdad?); me pongo mascarilla durante 15 minutos, la verdad, la que pillo por el cuarto de baño. Como rituales diarios, tónico, unas gotas de sérum  Aromessence de Lavanda de Decleor y mi crema de día.

De noche, hace dos días comencé con un nuevo tratamiento para las manchas (algo muy común en mi cara por las pecas) de Kiehl’s, se llama Clearly Corrective Dark Spot Solution y que tengo en versión monodosis de 14 días. Y también he comenzado a usar una crema de la marca americana Cetaphil que es especial para pieles secas -lo que viene a ser la mía- y me está sentando genial.

OJOS

En días aleatorios me aplico el contorno de ojos Aox Eye Gel de SkinCeuticals con el que tengo que tener cuidado para que no se me meta en el ojo porque si ocurre, me paso el día llorando. Una vez a la semana, me pongo los parches DetoxifEye de Pixi  en formato gel que me refrescan y me hidratan. No se muy bien cuanto tiempo deben estar, pero yo los tengo unos 10-15 minutos.

Y, para terminar, haga lo que haga, salga a pasear al perro o a cocinar, siempre unas gotas de mi colonia favorita y que uso hace ya más de 17 años, mi Colonia de Acqua di Parma. ¡Me chifla!

Así es como me cuido durante el “encierro”, sólo me queda despedirme y desearos mucho ánimo en estos días! Saldremos seguro!

1 Comentarios

  • angeles
    Posted 6 April, 2020 6:14 pm 0Likes

    Yo, salvo maquillarme, sigo la misma rutina de siempre.

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