A comienzos de verano, tuve la oportunidad de probar unos cosméticos de la marca Shiseido. Pude disfrutar de esta #bellezaenvenaexperience, gracias a la invitación de mi amiga, Sara y he de decir que este evento fue algo diferente y especial. Diferente porque fue una experiencia irrepetible, ya que en una tarde pudimos disfrutar de varios talleres, todos ellos diferentes entre sí. Y especial porque iba acompañada de mis amigas, y esto me permitió disfrutar de una tarde fantástica en Madrid.
Esta aventura comenzaba con una recogida por tres coches, todas las compañeras nos dividimos en tres grupos para ir hacia las oficinas de Shiseido. Cuando llegamos nos explicaron los productos que componían la nueva línea que iban a lanzar, que se llama Waso, y para qué servían. Tras esta pequeña introducción, comenzábamos con los talleres, talleres que tenían un significado.
El primero consistía en realizar una clase de yoga, tras esto, el grupo se dirigió a elaborar unas macetas. En este caso, las macetas eran remplazadas por cocos. Así es, aprendimos a hacer ¡cocodamas! El último taller consistió en grabar nuestros nombres o apodos en unas etiquetas de cuero mediante el uso de un martillo. Para esto, nos enseñaron que primero teníamos que humedecer el cuero para ablandarlo y así poder escribir nuestros nombres mediante golpes precisos de martillo. Todos estos talleres están relacionados con la mentalidad de la línea Waso, basada en el contacto con la naturaleza y el predominio de la sencillez.
Por lo general, las chicas de mi edad tienen la costumbre de maquillarse. Este no es mi caso, no me maquillo y quizás por ello mi piel sufre menos que las suyas, sin embargo esto no es excusa para no cuidarse. Este evento me vino genial para comenzar a cuidar mi piel ya que nos regalaron unos productos de esta nueva línea, que aún no habían salido a la venta, para probarlos y poder contar nuestra experiencia.
Lo primero que debo decir es que estos productos duran bastante, los he estado utilizando dos o tres veces al día durante todo el verano y me siguen durando. Y para resumir un poco cada uno de ellos, puedo decir que el Quick Gentle Cleanser es realmente cómodo, sólo hay que masajear hasta crear espuma y tras esto lavarse con agua. La crema hidratante, Clear Megahydrating Cream, se absorbe muy rápido y el exfoliante, deja la piel suave y tiene un olor muy agradable. En general, todos los productos me han dejado muy satisfecha, ya que mi piel está mucho más suave y cuidada de lo que estaba antes.
