T&T, un vino joven para iniciarse en la cultura del vino

Siempre me ha dado un poco de envidia esa gente que coge la copa de vino, se la lleva a la boca y ¡empieza a sentir una cantidad de cosas! Que si aromas de madera en el paladar, que si un regusto de frutos secos y frambuesas en primavera… No puedo evitar sospechar que hay mucho de postureo en toda esa explosión de sabores y olores. Creo que para disfrutar del vino solo hace falta una cosa, empezar a beber y dejarse llevar.

En Berberana Bodegas han lanzado el vino Tempranillo y Tapas, T&T, un nuevo concepto de vino joven para los que se inician en la cultura del vino –por cierto, a muy buen precio- y han preparado unos consejos para iniciados, para que triunfes en las cenas con amigos sin parecer un pedante. Ahí van algunos:

1. La copa: Nada de vasitos de diseño, la copa de tinto tiene que ser de cristal transparente, sin dibujos, redonda y con forma cónica en la parte superior para que se pueda sumergir la nariz y disfrutar de su aroma. Por eso el tamaño importa, las medidas recomendadas son entre 5 y 10 cm de alto y un ancho de 6’5 cm.  ¡Atención!, sirve solo un tercio para que puedas mover el contenido y apreciar color y aroma después de agitarlo suavemente.
2. La temperatura: El vino tinto se recomienda consumirlo entre 16 y 18 º C para que conserve todos sus matices porque si están calientes los alcoholes se evaporan y afloran los aromas más fuertes y menos agradables. Pero los tintos jóvenes se deben tomar algo más frescos, entre los 12 y 15º. Cuidado, coge la copa por el tallo para no calentar el vino.
3. El maridaje: Los vinos jóvenes son perfectos para comidas poco complicadas, es lo bueno que tienen. Puedes tomarlos con un plato de espagueti boloñesa y te sabrá riquísimo o con unos quesos, una carne suave y hasta pescados como el rape y el  atún.
4. La edad: Como ocurre con muchas personas, el vino no es más bueno cuanto más viejo. Los vinos tienen un periodo de consumo óptimo, la sumiller Meritxell Falgueras dice que “por mucho que guardes un vino joven nunca se convertirá en un gran reserva, sino en vinagre”, así que ¡apura la botella!
5. Los beneficios: Una copa de vino facilita la digestión y protege el corazón debido a su alto poder antioxidante. Pero lo mejor viene ahora, ¡reduce el sobrepeso! Un estudio del Instituto Tecnológico de Massachusets (MIT) señala que impide la formación de nuevas células de grasa y moviliza las ya existentes. La cantidad ideal para conseguir estos beneficios son 40 gramos al día.

El  vino es una maravillosa bebida para comer y compartir, una bebida de mesa y también de barra con los amigos, para el picoteo y la charla y también para la fiesta y la celebración.

La Navidad está cerca, habrá que ir haciéndose con unas cuantas botellas.