Conocí a Carmen Navarro cuando tenía únicamente un centro de estética situado en la calle Nicasio Gallego de Madrid. Hace…¡uf!, muchos años. Era un espacio pequeño y recoleto, pero lleno de buenas vibraciones. Un lugar en el que no solo te hacían limpiezas de cutis, te depilaban o te daban masajes, como en la mayoría de los de la época (confieso, hace casi 20 años). No, allí se respiraba el bienestar, el tan traído y llevado wellness, antes de que este anglicismo diera paso a una forma de hacer y sentir la belleza. Lo holístico era una realidad que Carmen había incorporado a sus técnicas y tratamientos porque para ella la belleza es armonía, una energía que no puede manifestarse en plenitud si un bloqueo espiritual, físico o mental entorpece que fluya. En cabina, sus manos eran un arma poderosa (una gloria, diría yo, que mi rostro y mi cuerpo, como el de muchas VIPS, han tenido la suerte tanto de sentir como de ver sus resultados), pero una de las cosas que más admiro en Carmen es que sabe ver más allá de sus virtudes y nunca dudó en incorporar los protocolos y aparatos más vanguardistas para aunar tecnología y tradición y lograr unos resultados que le han proporcionado la fama de eficacia de la que gozan ahora los seis centros que llevan su sello. Quizás el secreto de su éxito resida en esa magnífica manera de que tiene de conseguir amalgamar lo pionero con lo clásico, en construir futuro en el presente sin olvidar el pasado.

¿Y porque os cuento yo todo esto? Sencillamente porque es una breve introducción al objeto de este post, hacer una pequeña crónica de la entrega del último galardón que ha recibido mi esteticista de cabecera, mi amiga Carmen Navarro, y del honor que para mí (y creo que para mis dos colegas de blog y fatigas profesionales, Clara Buedoya sabéis, la directora de belleza de Harper’s Baazar– y María Eugenia Leónla jefaza de este cotarro digital que cada día tiene más relevancia en mundo de la belleza y aledaños gracias a sus ganas y saber hacer-) ha supuesto estar a su lado. El evento se celebró en el Hotel Palace de Madrid y allí nos fuimos las tres beautymaris, empericotadas con nuestras mejores ganas y galas, a acompañar a nuestra amiga en este bonito trance y ver la cara de satisfacción que se le ponía al recibir el premio Ciudadano de Europa que otorga la asociación Foro Europa 2001, en reconocimiento a su labor empresarial. Carmen lleva más de cuarenta en el oficio y es la primera mujer empresaria esteticista que lo recibe. Los anteriores galardonados han sido profesionales de diversa índole, que si escritores, que si médicos, que si abogados, que si ingenieros… así que en esto también es única y pionera. Ella, impecable. Lo que resultó llamativo fue la mediocridad de las viandas que compusieron el menú de la cena. Entre nosotras, ni la ensalada ni la pularda que nos sirvieron durante el evento estuvieron a la altura ni de la cocina del establecimiento, ni del postín que lucíamos todos los invitados. Una pena porque el Palace es el Palace y estos fallos no son buenos para su prestigio.

Al margen de lo gastronómico, La verdad es que me siento muy orgullosa de poder contar entre mis amigas del alma a una mujer como ella. Es una suerte, para mi espíritu y para mi cuerpo, porque gracias a ella aún puedo lucir vestiditos entallados sin que las lorzas se desborden. Este otoño, volveré a sus cabinas a que pongan en orden mis adipocitos, mi falta de hidratación y firmeza, mis arrugas y arruguitas,… que voy necesitando pasar una ITV en condiciones para seguir circulando por ahí con la frente bien alta y mis vaqueros ceñidos, luciendo estampa (que lo de los vestidos de alto copete y los estiletos los guardo para las ocasiones gordas). Esta temporada en Carmen Navarro hay muchas novedades que quiero ir probando, para luego contarlo, que si una máscara de luz led que deja el rostro reseteado; que si el Quantum Caci que reafirma las partes más complicadas,… Seguramente yo no reciba un galardón en mi vida, pero sí he recibido muchos premios, entre ellos tener amigas con Carmen Navarro, o como Clara, o como Geni.

2 Comentarios

  • Anonymous
    Posted 23 September, 2013 12:06 pm 0Likes

    muy bien el post. Muy bien Carmen Navarro. Pero ya va siendo hora de que le den un premio de verdad. ¿Para cuando la Gran Cruz de Isabel la Católica?

  • Ines Rocha
    Posted 23 September, 2013 12:41 pm 0Likes

    Maravillosa persona,maravillosos sus centros!!!

Comentar

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.