Lo reconozco. He sucumbido a los pinchazos. Yo que siempre presumía de no haberme pinchado nunca. Que teniendo mil y una oportunidades de hacerlo con los grandes gurús de la jeringa siempre me había resistido. Que si había algo que me diese pánico en el mundo estético eran las agujas… Pues señoras y señores, insisto, he caído. ¿Y…? No pasa nada.
Bueno si pasa pero todo bueno ¿eh? Pero cuidadito, la experiencia es positiva siempre que sepas en manos de quién te pones porque claro no es lo mismo que te pinche un médico con experiencia que la primera “niña” o el primer “señor” que te vende la moto en cualquier sitio. No. Ojito que las jeringas las carga el diablo y la carita de una se merece un respeto que luego pasa lo que pasa. Después de contrastar mucho, que para eso una se mueve en este mundillo decidí ponerme en manos de Purificación Espallargas que ahora pincha cada quince días en el centro de Carmen Navarro (Sagasta, 21). Acudí con otras tres compañeras de fatigas –no diré sus nombres porque alguna sé que quiere mantener el anonimato– y decidí esperar hasta el final para ver si se retorcían de dolor cuando la jeringa comenzase a rozar sus pieles. Yo, por si las moscas, ya había dicho que no me iba a pinchar, que solo iba a mirar.
Y la verdad es que cuando vi a la doctora cargar una pistola con una jeringa –que contenía un coctel de vitaminas de esos que hicieron famoso al doctor Chams solo que a un precio mucho más asequible que el que cobra el célebre doctor de las vips– y empezar a picotear la cara de una de mis colegas no daba crédito. La velocidad a la que iba la mano de Espallargas me hizo reafirmarme en mi decisión. Ni de coña. Sin embargo la paciente aseguraba, y su cara –que no se contraía ni nada– lo confirmaba, que no notaba los pinchazos.
Cuando acabó, la doctora me aseguró que con este cóctel lo que se consigue es revitalizar la piel, hidratarla y nutrirla, vamos darle más vidilla, más luz y más energía para que haga mejor sus funciones y luzca estupendamente. También insistió en que no iba a notar nada, que ella empezaba y que si me molestaba que paraba,… Con estos argumentos y con mis tres compañeras mirándome como si fuera un bicho raro y yo pensando en lo absurdo que era todo, que tampoco era como ir al patíbulo precisamente, decidí tumbarme y que fuese lo que dios quisiera. Eso sí dejando muy clarito que al mínimo dolor se paraba la sesión. La doctora cogió su fusil –porque menudo pistolón– y allá que fue. Y la verdad, ni me enteré. Vamos que notaba más los Garra Rufa de los que os hablé la semana pasada que los pinchazos. Eso sí porque la pistolita es mágica porque si te tienen que dar los chiquicientos pinchazos que me dieron a mi con una jeringa convencional no lo resisto ni de broma (lo se porque alguna amiga que ha probado las dos cosas dice que no tiene nada que ver, que sin la pistolita es una tortura china). Cuando terminó la sesión, que dura cinco minutitos escasos, me sentí una valiente –una sensación por otro lado ridícula porque ni dolía ni nada pero bueno– tanto que la doctora, ya crecida por mi savoir faire en la camilla, decidió que me tenía que borrar una arruguita del entrecejo.
16 Comentarios
*Amigas Makeup*
Si es tal y como lo cuentas, as tenido suerte y no parece tan agresivo como cuentan… así que perfecto!
bss
sirocox
Con el pánico que me dan a mi las agujas, de momento paso.
Un besito.
Shirley
La doctora tenía ganas de pillarte por banda por lo que veo, jaja. Felicidades por haberte enfrentado a tus miedos, que las agujas no son fáciles de digerir.
*May*
Hay madre que miedo, yo si que le tengo panico a las agujas… de momento me quedo con mis cremas y potingues varios jaja.
Elisa
Jajaj enhorabuena por poder auqnue ibas con miedo… yo creo que el botox son palabras mayores si engancha malo que claro ejemplo a la Kidman 🙂
Gug!
Pues enhorabuena por enfrentarte a tu miedo. Yo también hubiera dicho "no" al bótox.
Lo que no comentas es el precio de lo que te hizo…
tereG
Da miedito, pero si estás en buenas manos tranquiliza. De todos modos, da respeto lo de las agujas se que la piel necesita "alimentación" y que en ocasiones con la nutrición y la cosmética no es suficiente, ya nos dirás. Bsos. tereG
N.Poe
A partir de que edad son recomendables este tipo de infiltraciones?
Esther
enhorabuena por tu proeza yo estoy planteándome ingresar en el club pero me gustaría saber a que edad recomiendan empezar y sobre todo, a cuánto ascendió la proeza? Si conoces a alguien de confianza en Alicante agradecería la información .Gracias y besos. Me encanta tu blog y te sigo desde hace tiempo lo que pasa que me da un poco de "palo" comentar pero poco a poco….
Nataly
De momento me queda lejos lo de las inyecciones… pero que miedo! Yo me mareo sólo de ver una aguja acercarse a mí! Y vamos, ya si me tienen que pinchar chorrocientas veces me da algo xD
http://www.natalyscorner.blogspot.com
Besos!
Mª Eugenia León
Gracias por vuestros comentarios. La verdad es que al final no es tanto como parece aunque de momento lo del botox no me lo planteo. En cuanto a la edad más indicada para empezar depende de cómo este la piel de cada una. Para las vitaminas yo no lo haría antes de los 35 pero en cualquier caso lo mejor es que te vea una médico y te oriente. Esther intentaré enterarme de algún buen médico en Alicante.
Besos
Ross
Pues enhorabuena porque también tengo pánico a las agujas pero llevo un par de años diciendo que en mi 35 cumpleaños me regalaré una sesión de hialurónico. Pero como, por desgracia, cada vez lo veo más cerca,ya me voy echando para atrás pensando que igual, cuando llegue ese momento, aún no lo necesito…
Considero que si te lo hacen bien, una vez que empiezas a infiltrarte, da igual que sea mesoterapia o botox,ya no paras, siempre vas a volver.(siempre dentro de un límite).
Mi madre empezó con la mesoterapia y el hialurónico cada 4 meses y ha acabado pinchando botox dos veces al año, con unos resultados fantásticos porque si no te lo dicen ni te enteras, porque no se ha quedado totalmente planchada.
Un beso y ya nos contarás los resultados
Raquel
Hola:
Yo he probado la mesoterapia y para mí fue una tortura,se me caían uno lagrimones enormes pero después de leer tu artículo creo que no me puse en buenas manos.La verdad es que no me lo hicieron con pistola,fue pinchazo tras pinchazo pero de manera muy lenta.Me animaré a probar la técnica de la pistola porque la verdad es que me mejoró mucho la piel pero lo pasé fatal.Merece la pena pero si no duele.Gracias por informarnos de estas técnicas.
Evamar
Me encantaría probarlo pero me queda lejos de casa. Si algún día hago un viaje a la capital seguro que pido hora sin pensarlo. Gracias por compartir la experiencia.
Besos!!
Mona Monisima
Yo me lo hice hace un año y me encanto…este mes vuelvo a repetir!!! La piel parecía otra!! Y no duele nada!! Os animo a que probéis….bueno, mejor no!! Que os vais a poner muy monas!! ;))
Besos!!
Clincia Estetica Madrid
Con las técnicas adecuadas y las manos de un experto de verdad, no es un tratamiento doloroso para nada. Conviene destacar que los resultados son espectaculares si se aplica el producto adecuado y la experienca de un médico, para cada caso.